Cuando un colaborador es feliz en su trabajo se puede quedar más horas trabajando con mucho gusto; tienen 65% más energía y su compromiso es mayor; y hoy por hoy hay más organizaciones que le quieren invertir a ello.
Un estudio del Opener Institute de Oxford se percató de que cada vez son más las empresas que diseñan una cultura empresarial en torno a la felicidad de sus colaboradores, y han demostrado una innovación en capital humano con grandes resultados a largo plazo.
Pero…¿la felicidad es un negocio? sin duda es una gran estrategia de negocio para alcanzar el éxito, bien lo decía Martin Seligman, principal impulsor y padre de la psicología positiva, cuando habla de los cinco elementos fundamentales que contribuyen a la felicidad, entendida como un factor más tangible, humano y saludable, a través del conocido modelo PERMA.
P = Emociones positivas (Positive Emotions)
E = Entrega (Engagement)
R = Relaciones positivas (Relationships)
M = Significado o propósito de vida (Meaning)
A = Logros o metas cumplidas (Achievement)
Detengámonos un momento a pensar, ¿qué nos sucede cuando experimentamos emociones positivas? generalmente somos más productivos, empáticos, flexibles, estamos más dispuestos a aprender, a mejorar nuestras habilidades, nos encontramos más abiertos al cambio y desempeñamos mejor nuestras tareas ya que generamos pensamientos y acciones más constructivas.
Entonces, a consecuencia de todo ello, si tenemos colaboradores felices trabajando, los procesos creativos y de innovación serán mucho más rápidos, generando a la vez un eficaz afianzamiento en las relaciones interpersonales, el trabajo en equipo se refuerza, se incentiva el reconocimiento interno, el talento se conserva y se demuestran mejores actitudes ante imprevistos que surjan.
Pero además, tiene grandes beneficios para la empresa porque cuando éstos son felices consiguen más clientes satisfechos, se les da mejor trato a éstos, se vuelven buenos embajadores de la marca, son más empáticos, cuidan más la calidad de los productos y ofrecen siempre experiencias positivas y transformadoras.
Lo anterior encaja perfectamente con el modelo mental: Éxito (efecto) y Felicidad (causa) que explica en todas sus charlas Tal Ben-Shahar, filósofo y psicólogo israelita, experto en Psicología Positiva y conocido como el profesor de la felicidad en la Universidad de Harvard, cree que "la felicidad es una buena inversión para las organizaciones".
Ben-Sahar es uno de los expertos que estará presente en el WOHAW (World Happiness at Work Summit) que se celebrará el próximo 14 y 15 de noviembre en la Ciudad de México.
Es importante aclarar que las organizaciones no tienen la obligación de hacer felices a sus colaboradores a toda costa. Los individuos son en última instancia responsables de su felicidad, pero al mismo tiempo, las empresas pueden desempeñar un papel positivo en el bienestar de sus colaboradores. Antes se pensaba que el principal factor de la felicidad en el trabajo era el sueldo, hoy por hoy éste ha sido sustituido por el ascenso, el reconocimiento o una beca para que los colaboradores sigan desarrollando su carrera.
Tal Ben-Shahar cree que "el salario es una motivación hasta cierto punto. Si un colaborador siente que no recibe una compensación justa, terminará yéndose de la compañía. Pero si no hay situaciones que se consideran injustas, la retribución no es ningún problema, y el salario no juega un papel importante".
La felicidad es clave para el éxito de una empresa ya que genera rentabilidad, incrementa la productividad y amplía la satisfacción de todos. Ser feliz puede ser un hábito si así lo trabajamos.
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